Uno de los objetivos de Volvemos es ofrecer a los emigrantes que quieren volver a España las mejores oportunidades laborales para hacerlo. En estos años hemos centrado nuestros esfuerzos en buscar empresas en España que desean incorporar a sus equipos profesionales con experiencia internacional; pero ante la falta de recursos, no hemos podido desarrollar una estrategia para el fomento del emprendimiento como una opción de retorno.
Esta situación ha cambiado tras conocer a Isaías Cerro, Director Corporativo de Orion Hill, en el encuentro con empresas que celebramos en diciembre (en la fase de investigación para el Plan de Retorno a España).
Su labor se centra en ayudar a emprendedores a llevar a cabo sus proyectos mediante servicios de consultoría y finanzas, trabajando desde 2015 en proyectos de emprendedores retornados. Y junto a él hemos puesto en marcha una estrategia para detectar proyectos emprendedores y promotores que quieren volver a España para poner en marcha su idea. Además, se ha unido al equipo que trabaja en el programa piloto del Plan de Retorno a España, ofreciendo asesoramiento a emprendedores.
¿Por qué volver a España con un proyecto emprendedor?
Las motivaciones para emprender dependen de cada persona y de sus circunstancias profesionales y personales pero, por nuestra cercanía con emigrantes y retornados podemos afirmar que el hecho de haber vivido una experiencia internacional anima a muchos emigrantes a emprender a su vuelta a España. El conocimiento de otros mercados, otras metodología de trabajo y la propia experiencia internacional vivida ofrecen una visión diferente sobre cómo enfocar la carrera profesional.
Isaías señala como algunas de las razones para retornar con un proyecto emprendedor:
- Las diferencias salariales actuales con respecto a los países del entorno para mismos perfiles o incluso superiores.
- La existencia de sectores muy dinámicos y disruptivos gracias a la transformación digital.
- El crecimiento de la externalización de servicios en todo tipo y tamaño de empresas.
- La alta especialización y formación de los perfiles profesionales actuales.
- La óptima edad laboral de los emprendedores junto con su deseo de mayor estabilidad geográfica.
- La identificación por parte de las administraciones locales de la necesidad de reforzar sus tejidos empresariales locales.
- La lentitud con la que las grandes y medianas empresas se están adaptando a los cambios laborales en materias como:
- Flexibilidad de las condiciones laborales, como el teletrabajo y la dispersión de horarios.
- Independencia de los trabajadores responsables en la organización de tareas.
- Impulso de la meritocracia interna que permita una mayor promoción y reconocimiento de los individuos claves junto con una respuesta adecuada a sus necesidades de desarrollo.
- Errores recurrentes y sistemáticos en la planificación y medición de condiciones previas necesarias para la consecución de objetivos en cuanto a dedicación y fuerza laboral necesaria se refiere.
Estos motivos y el espíritu emprendedor de muchos emigrantes nos han animado a elaborar esta guía de recomendaciones para emprender que te ayudará a planificar el proceso de manera ordenada, desde tu posición actual trabajando por cuenta ajena hasta establecerte por cuenta propia en España.
Guía para emprender a tu vuelta a España
- Emprende en aquello que conoces. Distingue muy bien entre todas las actividades empresariales que tomes como referencia y elige aquellas en las que tu desempeño resulte diferencial o poseas mejores aptitudes. Va a hacer falta mucho de eso. Destina a segundas etapas aquello que requiera más investigación, formación y/o desarrollo. No podrás vender nada en un campo/sector en el que no cuentes con la mayor información y experiencia demostrable posible. Recuerda que tu CV va a ser el primer pilar de tu proyecto en el que mire todo tu entorno.
- Céntrate en la parte comercial. Es el motor de la empresa. El concepto comercial es el que medirá la supervivencia de tu proyecto. Al empezar necesitas sentar unas bases recurrentes que te permitan ganar consistencia futura. Y recuerda que toda buena idea sin clientes no es una buena idea.
- Crea un mapa donde puedas posicionar tu proyecto, a los clientes objetivo junto con toda la competencia con la que deseas hacer convivir tu proyecto. Piensa que este ejercicio es el que te va a permitir tomar referencias comparables. Al principio agradecerás “no inventar nada” y entender ejemplos que centren tu estrategia de manera realista y pragmática. Si lo haces con un formato lo más BIG PICTURE posible podrás identificar opciones de incubación y/o colaboración que no identificabas antes. Al principio nada te debe empujar a descartar buenas posibilidades para las primeras etapas de tu proyecto, justo cuando es más débil. Después llegarán la innovación y la investigación, pero debes partir desde base sólida.
- ¿Mejor sólo o acompañado? Si puedes lanzar tu proyecto en solitario, hazlo. Si tienes los contactos, conocimientos y recursos por ti solo, te animamos a emprender por ti mismo. En muchas ocasiones se emprende un proyecto con otros socios para compartir miedos y riesgos, no porque sea necesario. Sé valiente. Y si crees que es necesario emprender con otros compañeros de viaje, lee el punto 5.
- Rodéate de los socios adecuados, es decir, de aquellos que aporten lo que tú no tienes. Hazlo junto con una política de RRHH adecuada para organizarlo de manera efectiva. Una máxima muy útil es que detrás de los grandes proyectos siempre hay buenos equipos, independientemente de una mayor o menor valía de su promotor. Puedes hacer propuestas de contratación o propuestas de asociación, hacer crecer el capital cualificado de tu empresa es siempre una opción idónea para reforzar áreas críticas o claves.
- No tengas prisa en empezar. Si puedes permitírtelo, piensa que todo lo anterior no necesita tener la empresa creada. Una vez que esté creada, dedica tu tiempo a hacerla comercial y rentable.
- Existen las curvas de aprendizaje y los temidos imprevistos. Siempre. Si tu propuesta tiene grietas al principio que no tengas observadas y mitigadas en su medida, piensa que los dos términos anteriores las van a convertir en los verdaderos retos de tu proyecto.
- La práctica totalidad de los créditos financieros y las subvenciones que te propongas obtener van a exigir que la empresa sea rentable desde el inicio y tener cifras de ingreso y gasto dimensionadas a los montos de esas financiaciones. Ten precaución sopesando las opciones a la hora de dotar de liquidez a tu empresa. Cuenta con un profesional que te asesore detrás de estas decisiones, que estructure tu plan de manera muy exhaustiva y así evitarás llegar a situaciones extremas.
- Por último, antes de poner el 100% de tu energía sé honesto contigo mismo. Hazte las siguientes preguntas, y si las respuestas no son positivas, no tengas prisa y sigue buscando y madurando la idea. No te precipites.
- ¿Por qué tu negocio es atractivo para el mercado? No intuyas, básate en hechos. Busca ejemplos de ideas similares que han triunfado.
- ¿Es viable a medio plazo? La mayoría de las empresas fracasan en los primeros años de vida. No pienses que todos esos empresarios cometieron errores que tú no cometerás.
- Y la más importante, ¿es tu negocio rentable? Un negocio ha de tener un retorno económico. No confundas tu pasión, una idea brillante con un negocio que ha de obtener una rentabilidad económica. No es tan importante que lo sea inicialmente pero sí a medio plazo.
¿Piensas volver o ya has retornado a España con una idea emprendedora?
Si leer esta guía te ha ayudado a seguir adelante con tu proyecto te animamos a que rellenes nuestro cuestionario sobre emprendimiento. Gracias a él podremos conocer el estado de tu proyecto y las posibilidades de desarrollo en España. Recibirás una evaluación objetiva para que puedas orientarlo y, si así lo considera el evaluador, podrás recibir asesoramiento personalizado dentro del programa piloto del Plan de Retorno a España.